Revolución

Es convocada la muerte
a florecer de bronce.

En el tendido ocho,
el sol abrasa cabezas
y fermenta el vino tinto
de las peores cosechas.

En el tendido doce,
huele a jamón tulipán,
luciérnagas de puros humean
el dinero del alquitrán.

En el tendido ocho,
esperan la muerte real,
la que se lleva a sus hijos
ahogados en el lodazal.

En el tendido doce
ya ha caído la noche.